Esta joven sufrió durante muchos años malostratos feroces por parte de su marido. En una de muchas ocasiones en las que Dolphi quedó medio muerta por los golpes recibidos, huyo de la casa donde vivía y se escondió del agresor. El la buscó sin tregua y cuando la encontró, con un machete de largas dimensiones, la comenzó a golpear en la cabeza, en la cara.Dolphi, para defenderse, para salvar su vida, puso las manos tapándose la cabeza.
El asesino maltratador, siguió dándole machetazos hasta que le cortó sus dos manos a la altura de las muñecas.
No se sabe cómo pudo escapar, cómo pudo sobrevivir... pero fue un milagro que le implantasen sus manos aunque no las puede usar con normalidad.
Cuando por fin denunció su situación y pidió protección, tuvieron que darle su identidad que no existía, darle una nueva vida.
El agresor tiene que cumplir una condena ejemplar de 30 años de cárcel y mientras Dolphi, está trabajando en el centro de Atención a los Sobrevivientes de la Violencia, dedicado a la atención de las mujeres maltratadas, animando a las mujeres que sufren a salir del dolor y a recuperar su libertad y su vida.
Ella también recibe ayuda psicológica y es magnifico su espíritu.
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