Urra considera que el antídoto contra la violencia doméstica "está en la educación desde el hogar"

CEUTA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

   El presidente de la Red Europea de Defensores del Menor, Javier Urra, aseguró hoy en las IV Jornadas de Inmigración, Interculturalidad y Convivencia que organiza el Instituto de Estudios Ceutíes (IEC) en la ciudad autónoma que "el antídoto" contra la violencia doméstica "está en la educación desde el hogar, donde las madres tienen un papel determinante", ya que a su juicio "las leyes y los castigos son necesarios, pero siempre llegarán tarde". Al tratamiento que los medios de comunicación dan de este tipo de casos atribuyó "una gran responsabilidad" paralela.

   "Hay que conseguir tener alergia a la violencia, repudio extremo a levantar la mano", reclamó el ex Defensor del Menor de Madrid, que fue el primer ponente del congreso, en el que defendió la necesidad de "cambiar las mentalidades desde la escuela, pero también desde los movimientos sociales y vecinales, para influir en las actitudes, en los procesos de socialización y en las imágenes sociales compartidas".

   Urra lamentó que la violencia "está muy arraigada en algunos sectores de nuestra sociedad" y recordó que "hay jóvenes que tiranizan y agreden a sus madres". "Qué harán con sus parejas el día de mañana", invitó a preguntarse al auditorio del Salón de actos del Palacio autonómico, al que advirtió de que el pronóstico sobre la evolución del maltrato doméstico "es negativo". "Los jóvenes varones son poco respetuosos y algunos entienden la violencia como única forma de solución de problemas y hay una nebulosa en el papel a desempeñar por el varón en esta sociedad", reflexionó.

   Como conclusión, además de reclamar que se agilicen los procesos de separación o de que se incida en la sensibilización de los jóvenes "en las aulas y el hogar", Urra pidió "que se feminice" la sociedad haciéndola "más tierna, menos dominante, más sensible y menos psicopática".

   "Hay que ir a lo más profundo, al pensamiento íntimo, a las creencias, porque los frutos de esta apuesta por la educación en la ética e igualdad entre hombres y mujeres más allá de la asignatura obligatoria y evaluable de 4º de la ESO tardarán en llegar, por eso su puesta en marcha no permite demora", remató.